Alguna vez han deseado algo de forma casi enfermiza!
Pues yo desde que decidí vivir en pecado con … no le he preguntado si puedo usar su verdadera identidad, así que mientras logro llevar a cabo esa plática lo llamaremos el ingrediente secreto X … entonces decía yo que cuando decidí comenzar a vivir en pecado con el ingrediente secreto X lo que mas deseaba de forma enfermiza era tener un perro, de preferencia grande, peludo y como de película.
Pero no todo es como en las mugres películas, me falló un pequeño detalle en mis cálculos de mujer aprovechadora de hombres, y es que digo, si varias se ponen guapas para que les den auto, casa, las mantengan y todo eso, porque yo no hacerlo … Claro que mis requerimientos eran y lo son aún completamente diferentes a la mayoría de esas mutantes caza fortunas, yo no pedía mas allá de diversión, que me dejará trabajar y un perro!!!
Bueno en el inicio mi plan sonaba de maravilla y todo iba de gane hasta que comenzamos a vivir en un depa que resultaría la más triste prisión para el “perrito” de mis sueños, así que pospuse la idea por el momento, luego las cosas mejoraron por eso de que trabajamos adictivamente felices y ¡pum! que nos vamos a una casa, no es enorme pero es casa y tiene patio, ya me veía yo …
corriendo por el parque de la colonia acompañada de mi fiel mascota perruna, bajando todas las mañanas, abrir la puerta del patio que sería su hogar para que brincara directo a mis brazos, después tomaría mi café con el tirado a mis pies y mientras finjo leer el periódico cual la mejor escena de película, mi pie desnudo acariciaría su suave pelaje … verdad que sonaba de lujo!!
Pues verán … Para no hacer el cuento largo ¡pum! me embaracé y era o perro y croquetas o bebé y leche … Dude lo confieso, pero ahora tengo un pequeño monstruo de poco, muy poco pelaje y lejos esta de ser grande, colecciono latas de leche vacías, no he podido fingir que leo el periódico desde hace poco mas de un año y bueno ni tomar mi café de las mañanas, no corro en el parque, ni nada parecido … Pero al menos me tocó el de la manchita.
Y entonces se preguntarán: ¿qué demonios le falló en su malévolo plan?
Pd. Sigo deseando mi escena de película de forma enfermiza, solo que ahora la escena incluye a un mounstrito que seguro no me dejaría acariciar el pelaje del perro en cuestión porque se apoderaría de el, pero seguiré intentando convencer al ingrediente secreto X de cumplir mis sencillas peticiones, esperen informes al respecto, seguiré informando.
