Hasta los 5 años eras el niño mas aventado y valiente que conocía yo hasta ese momento, a decir verdad me daba pavor verte brincar desde el mueble hasta la cuna con tu cara toda feliz y una sonrisa impresionante, solo con el calzón y un trapo rojo amarrado a tu cuello que simulaba ser una capa, porque tu eras “El Capitan Calzoncillos” a medio vuelo por salvar al mundo, y yo sonreía y te animaba junto a papá Limón aunque mi cabeza me decía que tenia que estar lista para los peores escenarios, pero a ti estaba claro que eso no te importaba, bueno a ti ni se te ocurría.
Pero hoy 2 años después, no sé si culpar a la pandemia o si es algo que hubiera sucedido en algún momento, pero hoy eres el mounstro que le teme a todo!
Revisamos el closet, debajo de la cama, los cajones, tuvimos que guardar todos los muñecos, peluches, todo lo que tuviera una cara, porque tu te sientes observado y para ti eso es lo peor que te puede suceder hoy.
En un momento el miedo te invadió horrible y un día mientras jugabas en tu cuarto, todo se transformo, bajaste con un grito horrible, con la cara pálida como nunca antes, llorando de miedo, temblando, y no hubo poder humano que te hiciera entrar a tu cuarto durante mas de un mes, no supimos mucho que paso, solo que algo “alguien” estaba en tu cuarto, un par de semanas antes ya habías dicho que en las escaleras estaba “un señor”, así que aunque esta familia pareciera mas atea que otra cosa, recurrimos a rezar todas las noches, te hicimos una pistola que avienta agua bendita, así te sientes un poco mejor, pusimos un atrapa sueño, tu hiciste uno, dormiste en nuestro cuarto durante todo este proceso, sacamos todo de tu cuarto, lo limpiamos a detalle, y lo último que hicimos fue llevarte a curar de espanto.
Que si funciona … no lo se, pero te hizo sentir mas tranquilo, nunca había visto como se curaba a alguien de espanto … y no entendí mucho, solo te acostaron en una cama, una señora te rezó, mientras con una de sus manos parecía barrer cada parte de tu cuerpo y la otra mano era el recogedor que después se vaciaba directo en el piso, en un momento te sentaste y la señora me volteo a ver, si a mi me preguntan, tu te sentaste porque te intrigo ver que era lo que tiraba al suelo, pero la señora tembló, cuando termino, me dijo que estabas muy mal, ella temblaba y sudaba, y tu y yo cruzábamos miradas mientras nos preguntamos ¿qué rayos le pasa a la señora?, salimos de ahí contigo envuelto en una cobija, con la misión de no volver a salir ese día, y de taparte hasta que sudaras sin descanso … y nosotros lo hicimos, porque si algo pasa en esta familia es que: Todos para uno y uno para todos!.
No sabría decir si eso funciono, pero si sé que estas encontrando de nuevo el valor que tenias, que poco a poco estas volviendo a animarte a intentar.
Cuando tenias como 2 o 3 años y veíamos Sara y Pato, en un episodio un niño de repente dejaba de ser valiente y todos regresaban en sus pasos para saber que es lo que paso, el niño había dejado su valor olvidado en su patinete, y todo volvió a la normalidad.
No se donde olvidaste tu valor, pero si se que te estamos ayudando a encontrarlo, y no descansaremos hasta que lo logremos.
Ya duermes en tu cama, al inicio con la luz de la lampara prendida toda la noche, rezando antes de cerrar los ojos y aferrado a mi abrazó, hoy, ya apagaste la luz y dijiste –ya no es necesaria mamá.